Comprar un computador prenderlo y
que el disco duro no funcione. Ir a pedir que se lo cambien por garantía y que
le contesten “la garantía se demora 10 días hábiles. Llame a este teléfono en
ese tiempo y le tendremos razón”. El computador ya es suyo, ya lo compró, ya lo
tiene, pero se le demora.
Probarse un pantalón que le quedó
perfecto. No le saca la panza ni le esconde la cola. Pero por su 1.60 de
estatura tiene que dejarlo para que le corten la bota. “En tres días puede
venir por el pantalón arreglado”. Se le tiene, pero se le demora.
Buscar un trabajo. Mandar más de
10 hojas de vida, para que al mes lo llamen a una entrevista. Saltar de la
felicidad por la entrevista. Pero sólo es una entrevista. Falta todo el proceso
de selección. El nuevo trabajo se le tiene, pero se le demora.
Llamar a Telmex, perdón, a Claro para que le arreglen el Internet. Conecte el router, desconecte el router,
conecte el router, desconecte el router. Nada. Tendrá una visita técnica en 3
días hábiles. Es viernes por la noche y viene un puente. El jueves le
arreglarán el internet. Se le tiene, pero se le demora.
Comprar la boleta de un
concierto. Ahorrar un mes para comprarla y esperar seis meses para
el concierto. Un artista increíble. 2 horas de adrenalina pura y música para el
alma, se le tienen pero se le demoran.
Encontrar una persona maravillosa
con la que podría pasar las 24 horas del día. 7 días a la semana. 4 semanas al
mes. Pero se va a hacer un doctorado por 5 años al otro lado del mundo. O a
trabajar tres años por la paz en 15 países distintos de África. La historia de
amor, desamor, pasión, lo que sea, pero que sea, se le tiene, pero se le
demora.
Como esta entrada de blog, que se les tiene, pero se les demoró, y por eso suena esta canción.
Amélie Agujeros
@HoyosMariaPaula
No hay comentarios:
Publicar un comentario